FIN DE FIESTA

Lo prometido es deuda, una vez que se acaben los exámenes y trabajos se trae "la Play", eso está escrito. Hubo tiempo para todos, unos a los cochecitos, otros al NBA, aunque la mayoría del tiempo jugamos al PES. Quedará para el recuerdo el golazo a balón parado de Joaquín, que dejó a Víctor, que firmaba  ya el empate, con cara de "¿pero qué ha sido eso?". Se escribirán en los diarios crónicas sobre las encarnizadas luchas entre Dani y Adrián -la mayor parte de las veces firmando tablas-; las pasadas y repasadas entre Hugo, Iker, Gabi y Raúl con los Karts; o la canasta desde el otro campo de Isabel en el NBA, nunca se vio nada igual. Un servidor, por su parte, no encontró rival, por más que enfrente jugara un tal "Vanderwinkeljjggghhttt". Y es que son muchos años jugando con los sobrinos...

Entre medias de todo ello, nos visitó Aliatar, acontecimiento del que ya hemos informado en este blog; y para despedir el año, celebramos una opípara comida, aunque a la vuelta habrá que celebrar otra, porque -mira que siempre lo digo- sobró más de la mitad.

Así que, como decía el cerdito de los dibujos, "¡esto es todo, amigos!". Otro año más que se nos va en Gera, que es que ¡me lo quitan de las manos, señora! Pasa volando, esa el la verdad. Volvemos en 2020...

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