GERA, AÑO 5

¡Ya empezamos otro curso! El tiempo pasa que es una barbaridad, cuando "desembarqué" en Gera, Paula era la más peque, ni había cumplido los tres años, y ahora es la mayor de la clase...

Es un inicio de curso cargado de novedades. Pablo F., Yanira y Pablo M. nos "abandonan", después de cuatro años de convivencia, y se van con el gran "J. Barbudo". ¡Os echaremos de menos, chicos! Vuelve Iván, una gran noticia; Y en nuestra clase, contamos con dos "fichajes" nuevos, Dani y Adriana, que ya han pasado dos días con nosotros, y estamos todos encantados con ellos. Los comienzos son a veces difíciles pero los dos lo están llevando muy bien, entre otras cosas gracias a la ayuda inestimable de Martín y Andrea.

Hay cosas que no cambian, -por una vez- de lo cual nos alegramos, y es que Alberto y Tobe, los profes de Música y Llingua, repiten este curso.

Y, esta vez sí, hay que reconocer que el Ayuntamiento se está poniendo las pilas, y ya han venido por el cole a reparar algunos de los desperfectos que llevábamos años solicitando. Faltan muchas cosas, pero por algo se empieza...

Pero bueno, a lo que vamos. El primer día. Llegan los taxis, aparte de la alegría y alboroto que supone el reencuentro, el primer pensamiento es "¡cómo han crecido! Y es que, después de 80 días sin vernos las caras, se nota el estirón.

En clase hay muchas ganas de hablar, todos tenemos un montón de noticias y cosas que contar: El día que Paula fue al cine a ver "Ice Age 4", los castillos de aire que disfrutaron Martín y Kike, las piscinas de Andrea y Rubén, o "Pintina", la gata de Raquel, fueron los principales temas de conversación. Hubo también ya las primeras aportaciones para "Lo que el viento no se llevó" de este curso, igual tenemos que hacer dos volúmenes...

Y la mañana fue pasando rápido, cargada de novedades. A la hora del recreo llegaron Adriana y Dani. En clase jugamos a "El gato y el ratón", y entre todos les descubrimos a parte de "la fauna" de Gera: la rana cantora, Rosa la dragona, o Gregorio el tiranosuario, siempre acompañado de su hijo Gregorín, que nos hicieron bailar un rato. 

Y llegó el momento de recoger y despedirse. Y todos salimos la mar de contentos, que es lo importante. Un primer día lleno de experiencias, del curso ilusionante que se avecina. 

Ya el viernes, estrenamos nuestra pantalla gigante con una peli, aunque también "trabajamos mucho", según algunos... Pero eso, será otra historia...